EL GUERRERO ESPIRITUAL

El Guerrero Espiritual es aquél que dedica su vida a realizar un trabajo sobre sí mismo, independientemente de lo que pueda suceder en ella. Lo externo no le aparta de este propósito, pues entiende, que es lo más importante que ha venido a realizar.

Sabe que sólo así podrá relacionarse de una forma equilibrada y positiva con la realidad en la que vive y que todos los que le rodeen se beneficiarán de sus progresos.

Sabe que sólo superándose a sí mismo, podrá estar realmente preparado para salir al mundo y hacer su misión, la que haya aceptado realizar antes de encarnar.

El Guerrero Espiritual es el que se rebela a sus limitaciones, debilidades, conveniencias, miedos, culpas; el que aprovecha cualquier situación que se le muestra para superarse y mejorar; el que utiliza las situaciones negativas para sacar provecho y crecer aún más; es aquél que vive alegremente, sin darle fuerza a lo negativo, a lo doloroso, a lo imposible, pues bien sabe que solo con el deseo firme de querer, puede conseguir.

El Guerrero Espiritual se trabaja la Fe, la Esperanza, la Voluntad, el Amor, pues sabe que con estas cualidades llegará al final de su largo caminar, llegará a SU VERDADERO YO.

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El principal propósito del Guerrero Espiritual es conquistarse a sí mismo y obtener su propia libertad. En contra de lo que pueda pensarse, ser libre es comprometerse, es ayudar, es implicarse, es escuchar, es aconsejar, es estar, es amar, porque en todo esto hay corazón y es éste el que libera las almas, no lo externo, no las circunstancias, no los trabajos, no las persona.

La libertad nace del corazón, de la capacidad de éste de hacer las cosas por propia iniciativa, Se puede ser libre estando en una cárcel, porque la libertad está dentro de cada uno, no fuera. Todo es que sienta un anhelo irrefrenable de libertad es porque en su interior está aprisionado. 

Recebi e repasso de Kassandra Orama